Por Carlos Ríos Otero/ Hablemos Press.
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Sara Martha Fonseca, Mercedes Fresneda y Rita María Montes de Oca. Foto: Archivo de Hablemos Press.
La Habana, 27 de septiembre.― Una de las últimas formas de reprimir a la oposición en Cuba es inyectarla en los glúteos, mientras un grupo se dedica golpear, pero los fluidos van con una carga letal que provoca varias reacciones a quienes le aplican la desconocida mezcla. Según médicos, explican que debe ser un neuroparalizante.
Las tres últimas mujeres de las Damas de Blanco que recientemente han sido expuesta al desenlace fatal, de forma inmediata se acalambraron las extremidades inferiores y no pueden sostenerse por sus propias fuerzas, los dedos de las manos percibieron rígidos y no tuvieron fuerza por varios días para serrarlos y sostener un objeto de peso, uno de los hemisferio percibieron calambres, adelantándose la regla con abundante pérdida de sangre por más días de lo normal para su período menstrual.
También nublándose la vista, mareos, vómitos, diarreas sanguinolentas, un asco permanente, dolores en el abdomen, malas digestiones, cistitis urinaria y dolores en el páncreas e hígado y baja de azúcar con presión alta.
Sara Martha Fonseca, Mercedes Fresneda, Rita María Montes de Oca, explican ante cámara los efectos que le provocaron las letales vacunas de la MININT/DSE/Sección-21 quienes organizan las parapolicíacas Brigadas de Respuesta Rápida, las activista aún mantienen la secuelas de una extraña vacuna al parecer de los laboratorios de la industria de Biotecnología.
Otros médicos reflexionan, que podría ser una mezcla asesina de un producto químico y además mezclado con bacilos de laboratorio para una nueva forma de guerra en el uso de la batalla de ideas u guerra bacteriológica.
Médicos y científicos, que trabajaron en dicha industria, hoy en el exilio, recuerdan que Fidel Castro, nunca renunció usar las ciencias médicas de la biotecnología en macabras ideas represivas contra sus opositores.
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